Agosto de 2001.
En un comunicado, la fiscal Mary Jo White indicó que el narcotraficante colombiano Gino Brunetti, un hombre clave del poderoso cártel mexicano de los Arellano Félix, fue arrestado en el balneario mexicano de Cancún, y extraditado a Estados Unidos. Fue inculpado de conspiración de narcotráfico.
El cártel de los hermanos Arellano Félix, también conocido también como el de Tijuana, era en ese tiempo el mayor importador de cocaína a los Estados Unidos.
La investigación realizada por el fiscal de Nueva York reveló que Brunetti era responsable de distribuir miles de kilos de cocaína, entre ellos de grandes envíos a una red de distribución en el área de Nueva York.
El colombiano, buscando en ese momento reducir su sentencia, comenzó a delatar las operaciones de varios carteles del narco de México. Así salió a relucir el cartel del Milenio, una estructura considerada como cooperante del cartel de Sinaloa en los estados de Michoacán, Jalisco y Nayarit, y que tenía entre sus socios a Ignacio “Nacho” Coronel y a Joaquín Archivaldo Guzmán Loera, “el Chapo”.
Octubre de 2005.
Huyendo de la fuerte arremetida contra los carteles que iniciaba en México y que tomó fuerza con el gobierno de Felipe Calderón, y luego de haber sido señalado ante la DEA por Gino Brunetti, Óscar Orlando Nava Valencia, alias “el Lobo”, hermano de Juan Carlos Nava Valencia, alias “el Tigre” (la cabeza del cartel del Milenio para el año 2010), ingresó a Honduras con su nombre propio, según registros de inmigración.
Nava Valencia adquirió documentos falsos como hondureño y bajo el nombre Marco Antonio Ortiz Morales, con número de identidad 0506197201121, de oficio comerciante al por menor, comenzó a armar su estructura en el país.
Parte clave de esa estructura fue la Empresas Gastronómicas de Honduras, S. de R.L., propiedad de los empresarios Carlos Alberto Yacamán Meza y Nava Valencia, certificada con el número #45 del tomo 372 del Registro de la Propiedad Mercantil de San Pedro Sula, en el instrumento #2374, según trascendió en el periódico salvadoreño La Prensa Gráfica.
28 de octubre de 2009.
Oscar Orlando Nava Valencia, El Lobo, líder del cartel del Milenio, fue detenido por el Ejército mexicano después de un enfrentamiento en la ciudad de Guadalajara, Jalisco, e ingresado al penal de máxima seguridad El Altiplano, ubicado en Almoloya de Juárez, Estado de México.
15 de junio de 2010
A las once de la noche, en un restaurante del Barrio Río de Piedras en la ciudad de San Pedro Sula, fue asesinado el político liberal y cercano amigo del derrocado presidente Manuel Zelaya Rosales, Roland Valenzuela.
Según trascendió en la prensa en esa ocasión, Valenzuela llegó al hotel Victoria en compañía de un abogado y un conocido empresario sampedrano.
En el lugar se encontraba Carlos Alberto Yacamán, supuesto socio de Valenzuela con quien tuvo una fuerte discusión.
Uno de los acompañantes afirma que cuando Yacamán reclamaba a Valenzuela por un negocio relacionado con dinero, éste le pedía que por favor no le avergonzara.
En dos ocasiones los acompañantes sacaron a Valenzuela del restaurante para calmar los ánimos. Luego, cuando los tres regresaron al local. Yacamán había dejado el sitio.
Posteriormente Valenzuela se levantó para ir al baño y en ese instante Yacamán, que había regresado con un arma, sin mediar palabra se levantó tras él y disparó por la espalda a Valenzuela.
27 de enero de 2011.
Oscar Orlando Nava Valencia fue extraditado a Estados Unidos desde el aeropuerto de la ciudad de Toluca, donde elementos de la Agencia Federal de Investigación (AFI) entregaron a Nava Valencia a representantes de la oficina del servicio US Marshals del gobierno estadounidense.
15 de febrero de 2011.
La Unidad Antidrogas del Ministerio Público remitió este día a la Dirección de Lucha Contra el Narcotráfico (DLCN), bajo requerimiento UAD-18-2011, los datos brindados por un informante (no especificado) que declaraba que “En el sector de Río Bermejo (en la ciudad de San Pedro Sula), hay una bodega para almacenar droga. Se solicita diligencias de investigación”.
7 de marzo de 2011.
El seguimiento y la investigación que realizó la DLCN dio como resultado el allanamiento a la bodega propiedad del empresario sampedrano Eduardo Elías Hándal Saybe.
Según declaraciones ofrecidas al diario La Prensa por el entonces ministro de Defensa, Marlon Pascua, «nunca se había visto en Honduras tal cantidad (de armas) encontrada bajo esas circunstancias».
En un sótano secreto de la bodega de Río Bermejo, la DLCN encontró un poderoso arsenal de 13 lanzacohetes Law con el número de lote RAN-87B001-013; uno con lote RAN-85F-001-006; nueve más con distinto número de lote cada uno; 15 sin número de lote y uno ya disparado (39 en total); ocho fusiles AK-47; otros siete fusiles R-15 (seis con su respectivo número de serie y uno sin él); 11 granadas RPG-7, versión rusa de los Law; cuatro pistolas de distintos calibres, todas con número de serie; una ametralladora mini Uzi; un lanzagranadas M203, que es utilizado con granadas de 40 milímetros; un rifle calibre 22, sin número de serie; una mira telescópica; 652 cargadores, 625 para M-16, otros 23 para AK-47 y otros para diverso calibre; así como 410 balas sueltas de distinto calibre. Había además furgones con rastros positivos a droga sintética, químicos para fabricarla, 10 camiones de carga de distinto tipo con caletas secretas, 1 vehículo tipo sedán, siete contenedores o rastras con placas guatemaltecas y cuatro placas metálicas de la Policía Federal de México.
Según el informe técnico que la 105 Brigada de Infantería de Honduras envió al MP el 22 de marzo de 2011, como parte del análisis del arsenal incautado en Río Bermejo: “Rocket HE 66 milímetros, antitanque M72 A3, de fabricación estadounidense, puede penetrar hasta un pie (30.4 centímetros) de placa de acero, 2 pies (60.8 centímetros) de concreto reforzado y 6 pies (1.8 metros) de suelo y tiene un alcance efectivo máximo: blanco inmóvil, 200 metros. Blanco móvil, 165 metros”.
En el artículo «Cartel del Milenio compró cohetes Law que eran de la FAES» del diario La Prensa Gráfica de El Salvador, se describe que «el arsenal pertenecía al Ejercito Salvadoreño».
Un grupo de narcotraficantes mexicanos del cartel del Milenio compró los pertrechos a los militares cuscatlecos con el propósito de hacer uso de ellos en una zona rural de Zacatecoluca. Pero el armamento, que sería destinado para uso del cartel de los Z, nunca salió de Honduras.
Hubo, en esa ocasión, un único detenido: Miguel Ángel Banegas Ciles, el hombre que vigilaba la bodega, que fue condenado a 26 años de cárcel, según consta en el expediente número S. P. 360-2013.
Junio de 2014.
Carlos Yacaman fue extraditado de los Estados Unidos y enviado a la cárcel de máxima seguridad de Támara, Francisco Morazán. Según trascendió en la prensa, al llegar al país, Carlos Yacamán expresó que temía por su vida y pidió que lo llevaran directamente a la cárcel de Támara. Elvis Guzmán, vocero Ministerio Público, señaló que Yacamán Meza fue remitido a la cárcel de Támara a petición de él mismo, ya que manifestó temer por su vida; sin embargo no brindó su declaración ante las autoridades en la audiencia de imputado. Fue condenado a 11 años y 3 meses de reclusión.
6 de octubre de 2014
Eduardo Elyas Hándal Saybe fue declarado culpable de almacenamiento de armas y municiones de uso prohibido y facilitación de local para el tráfico de drogas. Fue condenado a 14 años de prisión y una mula de 240,000 lempiras.