Ismael Moreno, Director de Eric.
Parar el continuismo es parar el modelo neoliberal que encabeza el régimen autoritario de Juan Orlando Hernández Alvarado, puntual o coyuntural hay que presentar una firme oposición a la reelección, porque la reelección es un episodio en un proceso largo de consolidación, un modelo económico radicalizado, el llamado y esta convergencia es de oposición y en contra del continuismo del modelo neoliberal, que no termina el 26 de noviembre, que debe continuar independientemente de cual sea el gobierno que surja, por lo que se ha instalado es un régimen autoritario basado en la radicalización del modelo neoliberal.
Para el religioso, las fuerzas políticas de oposición están obligadas a insistir, en lo ilegal de la reelección, en lo fraudulento del proceso, además de hacer conciencia en la sociedad hondureña que la lucha contra el modelo neoliberal no se reduce a un proceso electoral, por lo que no termina el 26 de noviembre.
Las fuerzas del movimiento social se disponen a unir esfuerzos para hacer acciones, organizadamente, de manera pacífica y desde el narco que le faculta la democracia en contra del latrocinio que se presenta en el proyecto autoritario que encabeza Juan Orlando Hernández, reitero el padre Melo.
El padre Moreno señaló además que la oposición política debe denunciar las irregularidades que presenta el proceso electoral, como el control de medios de comunicación con fondos oficiales para publicidad de programas asistencia social, actos de sobornos y corrupción en las instituciones públicas, a fin de controlar a funcionarios públicos, no solo para que voten sino que convoquen a votar por un presidente.
El comunicado de Convergencia Contra el Continuismo, finaliza haciendo un llamado político no de naturaleza ni intención electorera. “Es de imperiosa razón, necesidad ciudadana y de país, de pueblo consiente y organizado. Es de genuina unidad nacional, de auténtica representatividad democrática, profundamente legitima, construida a base de consensos en todos los órdenes de la vida del desarrollo integral de la nación, y finalmente refrendado a través de un gran pacto político económico, social, cultural, que responda a las necesidades, anhelos y perspectivas de cambio del pueblo hondureño.
