Por Óscar Esquivel
No nos resulta extraña el papel que ha jugado la encargada de negocios de los Estados Unidos en Honduras la señora Fulton, en las recientes elecciones en nuestro país. La injerencia de Estados Unidos en nuestro país ha sido permanente, aunque en los últimos años ha sido más descarada. Pero los tiempos cambian. Hay una experiencia acumulada y una juventud hondureña más consciente y con mayor acceso a la información, a pesar del cerco mediático en donde nos pretenden desinformar, vendiéndonos una paz, una aparente normalidad.
El llamado de la señora Fulton a los hondureños, para que se respeten los resultados en las elecciones recién pasadas, me hizo recordar a la anterior embajadora Lisa Kubiske, quien en las elecciones de noviembre de 2013 se paseaba en el Tribunal Supremo Electoral “como Pedro por su casa”.
En octubre de 2015, junto a un grupo de amigos, hicimos entrega de una carta a la embajada de Estados Unidos de Norteamérica en nuestro país, exigiendo un alto a la injerencia en asuntos que solo competen a los hondureños. Evidentemente nuestra carta fue ignorada, pero eso no ha impedido que la indignación del pueblo hondureño vaya en aumento ante la injerencia norteamericana. Cada país encuentra sus estrategias de lucha, cada pueblo encuentra más temprano que tarde sus estrategias de defensa. Honduras, que no posee bombas nucleares para defenderse, pero tiene sus propios recursos y países amigos que sabrán defenderla en la hora decisiva.
A continuación, la carta en mención.
Tegucigalpa, MDC 19 de octubre 2015
Señor James D. Nealon
Embajador
Estados Unidos de Norteamérica.
Señor embajador , deseando que se encuentre bien y éxitos en sus funciones diplomáticas.
En los últimos años hemos venido observando la forma abierta de la injerencia de su país en nuestro Estado. En los últimos días usted ha opinado sobre asuntos que sólo competen a los hondureños. El periódico “El Libertador” en su edición digital menciona que usted ha presidido reuniones de la Comisión Nacional de Bancos y Seguros (CNBS) en donde se habla del cierre de una institución bancaria.
A lo largo de nuestra historia, la injerencia de su país en asuntos de interés nacional ha sido notoria. Su antecesora Lisa Kubiske en las elecciones pasadas se paseaba abiertamente por las bodegas del Tribunal Supremo Electoral, mientras opinaba sobre el mismo. La injerencia de la embajada que usted representa se debe en parte a la poca dignidad que nuestros gobernantes han tenido, una prensa sumisa y una sociedad poco culta, además de la posición geopolítica que ocupa nuestro territorio, la que la hace víctima de intereses extranjeros.
Honduras en su Contrato Social reza que es “LIBRE, SOBERANA E INDEPENDIENTE” y es a esos principios a los que apelamos para exigirle que respete y que se abstenga de opinar sobre asuntos que sólo competen al Estado de Honduras. Honduras es una nación pequeña, empobrecida por propios y extraños, pero no dejaremos de luchar por verla verdaderamente independiente.
Le reiteramos nuestra exigencia con el debido respeto que su cargo se merece, nos negamos y nos negaremos siempre a ser colonia de EEUU. ¿Le gustaría que fuese un hondureño a decirles que hacer en su territorio? ¿Qué acciones haría su gobierno, si un embajador extranjero opina sobre asuntos que solo competen a los ciudadanos de su nación?
Señor embajador es muy posible que usted ignore esta carta, pero quedará registrada que al igual que nuestros antepasados: Lempira, Morazán, Guillen Zelaya, Froylan Turcios, entre otros compatriotas, se pronunciaron en contra de la injerencia extranjera en nuestro territorio.
Qué este usted muy bien señor embajador.