Nosotros como Asociación de Energía Renovable que representamos a un sector productivo del país, un sector que le ha costado las inversiones, no solamente inversión en el sector energía, pero inversión social y ambientales, hacemos un llamado a la paz. Sentimos que esta situación es inadmisible ya, son actos de violencia acompañado de agresiones.
Estamos pidiendo lo que garantizan las autoridades que garantizan la paz, que podamos vivir lo que las leyes y el estado de derecho son parte de.
Como sector vemos una insistencia de grupos foráneos que no pertenecen a las comunidades, en llevar a cabo actos que perjudican no solamente la integración física de las obras de los proyectos, pero también de las comunidades, los empleados, toda aquellas personas que están en la zona de influencia de los proyectos.
Actualmente tenemos seis proyectos que han sido suspendidos a raíz de toda esta violencia y en donde existe un clamor de ciertas oenegés que piden que los proyectos se suspendan. Sin embargo, estamos viendo que no están ofreciendo nada a cambio, más que violencia y obviamente buscan un interés en particular que es la de los fondos.
Como sector privado queremos que retorne la paz, hacemos un llamado al Ministerio Público, que entendemos que tiene solicitudes tanto de desalojo como de investigación, para que se actué, porque no podemos seguir con estos grupos que están al margen de la ley.
Ya tenemos más de quince años de tener plantas operando comercialmente con la diversificación de tecnologías, tenemos biomasa, solar, hidroeléctrica, geotérmica y todo esto fue un rol muy importante en la matriz energética del país, porque ahora somos 65% renovables y también esto ayuda a evitar la fuga de divisas, a evitar que el petróleo entre al país, que no producimos petróleo y eso afecta directamente nuestra economía.
Estos proyectos que han sido atacados violentamente por grupos organizados de violencia que han llevado a cabo estos ataques directos a las instalaciones, a la empresa privada y a las propiedades, están ubicados en Tela, dos de ellos están en Tela y también tenemos un proyecto que está en Choluteca, un proyecto en Francisco Morazán que es el proyecto Petacón, cuyas instalaciones fueron quemadas y proyectos también en Santa Bárbara.
Quizás le interese leer además: CARLOS PADILLA, ASONOG: EL PROBLEMA DE LA MINERÍA NO SE ACABARÁ MIENTRAS NO SE CREEN MECANISMOS DE PARTICIPACIÓN REAL DE LA CIUDADANÍA
http://elpulso.hn/carlos-padilla-asonog-el-problema-de-la-mineria-no-se-acabara-mientras-no-se-creen-mecanismos-de-participacion-real-de-la-ciudadania/
Agua Zarca es un proyecto que lleva suspendido casi tres años. Estamos viendo que es un patrón sistematizado que se repite a lo largo y ancho de Honduras, cuyos discursos son los mismos y también actividades y acciones son las mismas, las comunidades realmente apoyan estos proyectos, no por que representan infraestructura, programas sociales y ambientales, sino también porque generan empleo y los empleos en zonas remotas y rurales son muy valorados, van más allá de lo que es dar un empleo en una ciudad, porque ¿cuál es la industria que se trasladaría a esta zona?, solamente estos proyectos renovables que se tienen que ajustar a donde está el recurso natural.
Estos grupos están liderados por tres o cuatro personas. Entre ellos se acompañan. Existen grupos que tienen bandera indígena, otros que tienen bandera ambiental, otros bandera ecológica y lo que hacen es que entre ellos organizan manifestaciones y se acompañan. Pueden ser cinco personas en la comunidad que estén en contra, pero son acuerpados por personas de afuera y así hemos visto un patrón que se repite en estas oenegés, que tal vez se dedicaban a algo similar pero ahora ven que este es un negocio que les va a permitir ingresos, no solamente a nivel local pero también a nivel internacional.
Al final nuestra pregunta es ¿quién va a pagar estos daños? ¿quién va a pagar la no producción de energía renovable? ¿quién, al final del día, va a responder ante estos actos de violencia? y ¿qué va a pasar con todas estas comunidades donde 300, 200 hasta 500 familias dependían de los salarios de estos empleados?
Tenemos más de quince años generando proyectos operativamente y hay lecciones aprendidas ¿qué hacemos con las comunidades una vez que se va el proyecto?, bueno, hay tres actividades. Las que mantienen la parte operativa, que genera poco empleo, pero también está la parte ambiental. Las hidroeléctricas tienen una característica que deben de proteger las cuencas, aquí se requieren entre 70 y 100 empleados porque son cuencas en su mayoría en zonas muy remotas, donde no hay una protección del ICF, entonces hay que crear un equipo que logre llevar a cabo actividades de reforestación y de conservación.
Desde 2013 tenemos lo que se llama el fondo de responsabilidad social, en donde por cada kilowatt hora que genera la planta se genera un fondo de acuerdo a la generación que es equivalente al impuesto. Entonces por un lado fortalecemos la alcaldía con impuestos, y por otro lado hemos creado un fondo de responsabilidad social donde estas comunidades deciden qué proyectos va a realizar la empresa, en la etapa de operación comercial.
Hay un tema muy importante, nos convertimos en un vecino aliado estratégico para llevar a cabo actividades de sostenibilidad. La idea no es seguir reparando carreteras y todo aquello que una vez que llueve se daña, la idea es crear empresas independientes, crear cajas rurales y también financiar pequeñas y medianas empresas para que estas madres solteras o estas personas que tienen un potencial de soldadura puedan levantar sus empresas.
Ya tenemos ejemplos a lo largo y ancho de Honduras porque hay más de ochenta plantas que operan y esa es la pregunta ¿por qué no existe oposición con las platas que ya operan? Porque ya es evidente todo el apoyo social y ambiental durante las etapas ya operativas, en construcción. Si se quedan a medias los proyectos, es muy probable que la empresa no pueda continuar con los programas sociales.
Los 80 proyectos que tenemos de más de 32 hidroeléctricas, que también ya operan en zonas indígenas. Tenemos proyectos eólicos, solares, de biomasa y uno geotérmico. Ya estamos en una generación de más de mil doscientas mega watts, que esto representa el 65% de la matriz energética del país.
http://elpulso.hn/miriam-miranda-ofraneh-que-no-empiece-esa-empresa-privada-a-decir-que-somos-vandalos-porque-les-iniciamos-un-boicot/
Cuando estos proyectos iniciaron, hace quince años, nuestra matriz era 70 térmica 30 renovable, hoy tenemos una matriz donde ya estamos logrando estadísticas similares a las de Costa Rica, que es un país líder en energía hidroeléctrica con un 94% renovable. La idea es convertirnos en un país que, similar a estos país donde la energía es de fuentes renovables, lograr algo que todos queremos, la seguridad energética, no depender de importación de combustibles para llevar a cabo la demanda nacional de energía.
Yo quiero hablar de algo muy importante, que es cuando las decisiones políticas están por encima de las técnicas y las financieras, la tendencia de la ENEE ha sido una ENEE política, en donde ha subsidiado demasiado al consumidor final y hoy estamos viendo ese costo político de no haber educado una población de que la energía iba a subir de acuerdo a la factura petrolera, por un lado tenemos que retuvieron precios por muchos años y ahora que económicamente ya no puede seguir subsidiando, están llevando a cabo ajustes de la tarifa de acuerdo a lo que la ENEE está vendiendo la energía y comprándola por otro lado, la promesa de que la energía va a bajar por lo menos de parte del sector nuestro nunca se prometió. Lo que si se prometió es sostenibilidad a lo largo de los años, es decir, nuestras empresas hoy requieren de financiamiento, por eso nuestros precios van de acuerdo a la deuda, pero una vez que esa planta solar o hidroeléctrica ya pagó toda su deuda, el precio definitivamente se mantiene estable, entonces lo que prometimos fue seguridad energética y seguridad de precios.
La energía renovable tiene un precio entre 14 y 18 centavos y la energía térmica por un tema de momento bajó, pero ya la tendencia es que el barril de petróleo va hacia la alza y eso geopolíticamente no lo podemos controlar en un país como Honduras, entonces cuando el petróleo suba, ya los buenos de la película van a ser los renovables.
Hay que tener muy claro que la tarifa va a mejorar a medida que se reforme el sector. ¿Qué estamos pidiendo como sector de energía renovable? Que se reforme la actividad a a un mercado mayorista. Solo con un mercado mayorista los precios van a poder bajar porque habrá verdadera competencia y vamos a poder romper el monopolio que hoy es manejado por la ENEE.
Es totalmente falso que Honduras tiene energía más cara, existen ya datos (hablando de la renovable) en general, no es la energía más cara. El consumidor final en Centroamérica paga una tarifa más alta.
¿Qué están haciendo los demás países? Están haciendo otro tipo de inversiones, están invirtiendo en sub estaciones, en medidas de transmisión. En el caso nuestro construir una hidroeléctrica, construir un parque solar, construir una eólica es mucho más caro por las condiciones del país, tenemos tasas de interés más altas, entonces el comparativo realmente no aplica.
Si queremos compararnos con Panamá, Panamá tiene tasas de interés al 4% o sea que realmente hay costos asociados al país que no se comparan con el resto de la región.
El consumidor final, pensemos en eso, Honduras como consumidor final, si pagamos menor cantidad por kilowatt hora que lo que hace Costa Rica y Panamá, eso está verificado, tenemos toda la información trasmitida por el CEPAL. También hay presiones políticas para que los empresarios bajen el costo de la energía y esto ha sido también una campaña sucia que se ha venido manejando contra el sector.
¿A cuánto vende la ENEE? y ¿a cuánto compra la ENEE? Estamos nosotros conscientes de que tenemos que educar y dar a conocer nuestras estadísticas de una manera abierta, eso por un lado.
Por otro lado, construir en Honduras no es sencillo, tenemos un tema de seguridad.
Para que estas empresas vinieran a invertir a Honduras se fomentaron incentivos que son normales en todo el mundo, para crear no solamente una mejora en la matriz energética pero traer nuevas tecnologías.
Los discursos sistematizados y repetitivos están creando una confusión en la población en general y vuelvo a la misma pregunta ¿por qué dónde ya están operando comercialmente los proyectos no hay protestas? Porque ya se comprobó que la comunidad los quiere. Y le invitamos a todas las personas que tengan esa duda.
Cuando el proyecto opera es una utilización del rio de ciertos kilómetros y se respeta lo que se llama el caudal ecológico. Este caudal ecológico es un porcentaje que siempre se deja en el rio para mantener la vida acuática y todos aquellos usos que se comprobaron en el rio previo a iniciar construcción, existe una línea base y toda el agua que opera las turbinas vuelve de nuevo al 100% al cauce del rio. Inclusive vuelve oxigenada y mucho más tratada porque el efecto que hacen las turbinas es el movimiento que hacen las plantas de agua que las oxigenan, entonces vuelve mejor, vuelve la misma cantidad de agua y tratada.
Por eso vuelvo y digo: hay 80 proyectos en Honduras operando y hay más de 33 plantas operando comercialmente, si hacemos una auditoria de las que ya operan comercialmente van a enterarse de que el agua vuelve a todo el rio, por eso atacan las que están en construcción, porque teóricamente pueden utilizar los discursos de que es mundial la oposición para desprestigiar y realmente confundir a la población. Pero si vamos a ver a cada una de las que ya operan, tenemos una en la Esperanza, Intibucá, que fue construida por Copines, porque eran los empleados de esta planta y esa planta está operando comercialmente desde el 2004.
¿Por qué no hablamos de esa planta? Como ya opera, ya existe la evidencia de que el agua vuelve de nuevo al rio, a estos opositores no les conviene hablar de eso. Hay proyectos en Intibucá, en Jesús de Otoro, en la Paz o sea tenemos proyectos en toda Honduras, donde ya está la evidencia de que lo que entra en las turbinas vuelve a subir en calidad y en cantidad.
Hemos identificado algo, esta es una oposición sistematizada que viene a lo largo y ancho de toda la región, inclusive Latinoamérica, en general. Es un negocio. Si usted logra la fotografía perfecta, como digo yo, si usted logra mandar fotos de que lo están oprimiendo y es un proceso sistematizado, vemos que el mismo discurso, la misma manera que hablan, que tocan el sentimiento del ser humano, lo están haciendo de manera sistematizada. Los preparan, hay movimientos que se dedican a esto, hemos identificado en Honduras que también hay presencia de organismos internacionales que están avalando todas estas actividades de estos opositores y los están autodenominando, sin verificar en campo, como líderes de ciertas comunidades.
Es un fondo que está viniendo de Europa, lo pude comprobar. Yo visite un evento en Ginebra el pasado noviembre en donde hay una feria hay ONG`s que están dispuestas a financiar, entonces usted lleva la historia, muy buena, bien montada, usted logra captar fondos.
Viven de los fondos que logran de estos fondos europeos y se ha vuelto realmente una distorsión de los hechos, estos fondos tienen un objetivo específicos y quiero pensar que tienen un propósito bueno, pero aquí llegan a bolsillos de directivos y dirigentes. Es otra la historia y es otra la actividad. Si queremos hacer un llamado a todas estos organismos internacionales que están financiando a oenegés nacionales, porque realmente son los autores intelectuales de esa violencia que vive el país, que hoy está obstaculizando más de 265 millones de dólares en inversiones en el sector de energía renovable, específicamente mas de 130 mega watts de energía limpia que no se van a producir a corto plazo por culpa de toda esta oposición organizada con violencia.
Si a usted le dan un premio por 170 mil dólares sin haber sido ambientalista, nunca haber sembrado un árbol ¿no lo motiva a usted? a decir “se puede ganar dinero fácil de esa forma.”
Creo que este tema de dinero siempre estuvo enfrente, cuando tenemos un premio que fue una auto denominación, que no verificó en campo si era o no ambientalista y luego quedó el título, pues obviamente motiva a otros grupos que ya saben la verdad, saben que no hay que ser ambientalista ni indígena ni defensor de derechos humanos, simplemente montar una buena historia y el premio Goldman, todos sabemos que fueron 170 mil dólares ¿dónde están? ¿están en las comunidades? obviamente no. ¿Están en algún parque nacional? obviamente que no. Entonces ¿dónde?
Por eso el llamado, no es tanto a los que están creando violencia acá, al financiamiento que está viniendo de afuera y que no está llegando a los verdaderos grupos ambientales. Tenemos el caso de Cuero y Salado que está protegiendo un verdadero parque nacional y no están siendo tomados en cuenta en este tema de fondos orientados a temas ambiéntales. Si queremos proteger el ambiente, no va a ser con discursos románticos, va a ser con verdaderas actividades que logren realmente la forestación y conservación.
Donde se ha distorsionado el objetivo, yo quiero pensar y lo digo que estas fundaciones, oenegés internacionales, tienen un buen propósito pero al no hacer debidas diligencias en el campo, estos fondos no están llegando al ambiente ni a comunidades ni a la parte social.