La convención del Partido Nacional, realizada el fin de semana pasado en la ciudad de Danlí, departamento de El Paraíso, desnudó la división a lo interno de ese partido político.
El ex presidente Porfirio Lobo Sosa, fue el primero que arremetió contra Juan Orlando Hernández y los dirigentes del Partido Nacional, a la vez pidió disculpas al pueblo hondureño por haber apoyado la reelección presidencial manifestando que los nacionalistas sienten vergüenza por el gobierno dirigido por Hernández.
“Me arrepiento de haber apoyado la reelección en aquel momento, es de sabios rectificar. Este gobierno de Hernández debería ser criticado porque se ha alejado de los principios partidarios; aquí los pobres es lo que menos les importa; Los nacionalistas no hemos tenido un gobierno para sentirnos orgullosos, más bien lamento que estén utilizando al partido como escudo porque no resuelven ningún problema y lo que hacen es dañar el partido. El partido no funciona la dirigencia está coactada” aseguró, Lobo Sosa.
Por su parte, Ricardo Álvarez, que ha fungido como designado presidencial de Hernández y aspira a la presidencia, también hizo público su rechazo contra el oficialismo en el Partido Nacional arguyendo que está cansado de servirle de escalera a otros y criticó duramente el llamado a la unidad hecho por Hernández en la convención en Danlí.
“Ya no más servir de escalera exigimos respeto y oportunidades por lo que se cachimbean para ganar elecciones, eso es lo justo. La unidad se da cuando hay respeto, inclusión y buen trato. Unidad total es cuando no hay amenazas, atropellos ni presiones. Unidad total es cuando dejas en libertad a cada individuo elegir con quien estar. Reflexionemos, estamos a tiempo. Unidad total es que todos cuenten” expresó, Álvarez.
En respuesta esto, Juan Orlando advirtió que el nacionalista que quiera un cargo de elección popular y confronte o cree división a lo interno, no seguirá trabajando con él.
“quiero advertirles, el líder o lideresa que no entienda la magnitud de unidad de la democracia, del respeto, haga daño al partido; el partido le va a hacer justicia y todos nosotros los buenos nacionalistas le vamos a hacer justicia. El funcionario que trabaje conmigo y se salga de esa raya no va a seguir trabajando conmigo” señaló Hernández.
La convención nacionalista, más que demostrar la fortaleza del Partido Nacional, ha desnudado las grandes divisiones entre sus máximos líderes y la difícil tarea que enfrentarán en las elecciones primarias para elegir a un candidato.