La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Honduras (OACNUDH) se pronunció y condenó la represión policial en la movilización del 15 de septiembre que dejó como saldo ocho personas detenidas y una persona herida.
La movilización denominada “¿Cuál Independencia?” fue convocada por sindicatos de maestros, la Coalición Contra el Continuismo, entre otras organizaciones, dando inicio en el bulevar Morazán hacia el Parque Central de la capital de la República donde al final miembros de seguridad reprimieron con el uso desproporcionado de la fuerza a los manifestantes.
“En el contexto de las manifestaciones, OACNUDH recibió información preocupante sobre un posible uso desproporcionado de la fuerza en contra de manifestantes por parte de cuerpos policiales. Según los estándares internacionales de Derechos Humanos el uso de la fuerza debe regir por los principios de legalidad, necesidad, proporcionalidad, prevención y no discriminación que son aplicables a toda actuación policial en cualquier contexto. OACNUDH hace un llamado a las autoridades a actuar en línea con las obligaciones descritas, condena todo acto de violencia sucedido en el contexto de las manifestaciones e insta a una investigación exhaustiva que determine las responsabilidades que correspondan”, cita la OACNUDH.
En el contexto de las manifestaciones del día de hoy, OACNUDH recibió información preocupante sobre un posible uso desproporcionado de la fuerza en contra de manifestantes por parte de cuerpos policiales. 1/3
— OACNUDH Honduras (@OACNUDHHN) September 15, 2020
Por su parte, miembros defensores de derechos humanos del Comisionado Nacional de los Derechos Humanos en Honduras (CONADEH) reportaron que el resultado final fue la detención de ocho personas, un defensor de derechos humanos herido y un joven con heridas de gravedad en su vista debido al químico provocado por el agua de la tanqueta policial.
Cesario Padilla, del Comité por la Libre Expresión (C-Libre), denunció que las fuerzas de seguridad utilizan el gas lacrimógeno sin tomar las consecuencias dañinas en medio del aumento de contagios de Covid-19, a la vez cuestionó que el gobierno decreto la no circulación el 15 de septiembre para “callar a la población”.
“A la policía solo le interesa reprimir… El mensaje que parece haber dado el gobierno es que la ciudadanía no se movilice, que se calle, que se silencie. Se lanzó balas de goma, gas lacrimógeno, no importa si el gas lacrimógeno en contexto de Covid-19 es dañino, a ellos no les importa. El mensaje del 15 de septiembre era imponer un silencio por eso habían decretado que nadie saliera”, denunció.
Por tercer año consecutivo la movilización alterna que se desarrolla cada 15 de septiembre desde el marco del golpe de Estado en Honduras terminó en enfrentamiento entre manifestantes y policías, mientras los principales líderes de oposición y el oficialismo se muestra cómodos en otras actividades.