TEGUCIGALPA, Honduras
El expresidente Juan Orlando Hernández, acusado por EE.UU. por narcotráfico, envió una carta a sus leales en la que reiteró que es inocente e indicó que altos funcionarios estadounidenses conocen su lucha.
La carta fue leída esta mañana por la exprimera dama Ana García, en la que dijo que “su esposo es víctima de acusaciones falsas y también de una venganza por parte del crimen organizado, debido a su lucha contra el narcotráfico en el país”.
En la misiva el exmandatario proclamó su inocencia, e hizo un llamado al pueblo de Honduras, reiteró a la nación, y al mundo entero de que “soy inocente, soy víctima de una venganza y una conspiración por parte de los grupos del crimen organizado y enemigos políticos”.
Hernández aseguró que durante su gestión tanto en el Congreso Nacional como en la presidencia, trabajó en conjunto con altos funcionarios de EE.UU. en la lucha contra el narcotráfico, crimen organizado y la violencia en Honduras.
Hernández señaló que “estas acusaciones son falsas e injustas llenas de mentiras construidas de manera novelesca en base al testimonio de testigos colaboradores todos narcotraficantes confesos con acuerdo de negociación con la fiscalía”.
“Estos testigos son capaces de decir cualquier mentira con tal de lograr su venganza contra mí y la reducción de sus penas, no pagar por sus crímenes contra cientos de hondureños y tener nuevas identidades para sus familias”, afirmó Hernández.
También aprovechó para hacer un llamado a la reflexión a los funcionarios y agentes de Washington y hondureños que acompañaron su lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado que vieron y reportaron sus actuaciones de cerca, por las que en reiteradas ocasiones fue felicitado para que defiendan esos recuerdos.
El exmandatario sostiene que está convencido que estas terribles acusaciones que hoy de manera injusta lo mantienen recluido en una cárcel en EE.UU., lejos de su familia, su patria, se originaron en una venganza de narcotraficantes que vieron sus imperios de terror destruidos con nuestras acciones.
“Lucharé por esta verdad hasta las últimas consecuencias. Porque de por medio, no sólo está mi vida, sino la de mi familia, el de mi equipo y compañeros que acuerparon esta lucha, en nombre de Honduras que ha sido dañado por todas estas mentiras”, aseveró el exmandatario.
“A los buenos políticos, funcionarios periodistas, académicos y ciudadanos general en Honduras, en Estados Unidos y otros países que investiguen la terrible conspiración que han hecho ciertos sectores oscuros contra mí, quién siendo un amigo de USA (EE.UU.) sin distingos políticos, siendo inocente, hoy estoy encerrado en una prisión; que no callen la verdad” dijo.
Asimismo, se refirió a las irregularidades por las cuales ha vivido en su proceso penal como la entrega tardía de la información fuera de los plazos establecidos por el juez federal Kevin Castel, la entrega de un dicto duro infectado con malware, la infiltración de su defensa y la negación para aplazar el juicio.
El exmandatario se despidió diciendo que tiene la fe y la confianza en que la justicia prevalecerá y a su vez solicitó oraciones para que la verdad salga a la luz, e insistió en su inocencia.
El otrora hombre fuerte de Honduras enfrenta cargos relacionados con el narcotráfico en una corte del Distrito Sur de Nueva York, Hernández sostuvo en la carta que estas acusaciones son infundadas y reflejan una estrategia para dañar su reputación y la de su familia.