TEGUCIGALPA, Honduras
Tras la denuncia que realizó la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ), sobre el mal manejo de 824 millones de lempiras por concepto de gastos administrativos y baja productividad en el Congreso Nacional, los diputados de oposición y analistas políticos alzan la voz ante estas supuestas irregularidades.
Ante las recientes denuncias de las organizaciones de la sociedad civil desató fuertes críticas en contra del partido de Gobierno, mientras que los diputados del oficialismo respondieron que es una campaña de desprestigio en contra del gobierno del Partido Libertad y Refundación (Libre).
El diputado de Libre, Jari Dixon Herrera desestimó dichos señalamientos y aseguró que “si creen que se ha cometido un delito, que acudan al Ministerio Público no pueden seguir utilizando estos informes solo para desprestigiar todo lo que huele a gobierno de Libre”.
Por su parte el analista político y presentador de televisión, Rafael Jerez, a través de su cuenta de X criticó las justificaciones ofrecidas por la directora financiera del Poder Legislativo, quién sugirió que las redes sociales de los diputados bastan para acceder a información sobre fondos departamentales, “espero que respondan así dentro de unos cuantos años frente a un juez, cuando ya no controlen el Ministerio Público”.
Asimismo, el candidato a la Alcaldía Municipal del Distrito Central (AMDC), Juan Diego Zelaya arremetió en contra del expresidente Manuel Zelaya a quien acusó de manipular la agenda legislativa para desviar la atención pública.
“hoy el tema son los excedentes de presupuesto, el uso ilimitado y sin discreción de fondos ¿Y la falta de medicamentos, el pago a los médicos, el desempleo, el caos vial?”, cuestionó Zelaya quien a su vez afirmó que “el gobierno ha fracasado y que detrás del discurso oficial hay un plan Venezuela para Honduras”.
Entre tanto la diputada nacionalista, Johanna Bermúdez también se sumó a las críticas y expresó que “cuando las investigaciones de la ASJ y el Consejo Nacional Anticorrupción (CNA), apuntaban a otros gobiernos, Libre las aplaudía. Hoy, que los señalamientos los alcanzan, intentan deslegitimarlos”.
Además, Bermúdez subrayó que “quienes ayer se rasgaban las vestiduras contra los corruptos hoy se revuelven cuando se destapan sus propias miserias. La corrupción no cambia de color político y la verdad no se calla por conveniencia”.
Mientras las acusaciones se intensifican, se endurece el debate sobre la transparencia, la rendición de cuentas y la independencia de las instituciones continúa marcando la política del país.