El Consejo Hondureño de la Empresa Privada (COHEP), ha exigido al Gobierno de Honduras poder habilitar la economía de manera inteligente asegurando que cuentan con los procesos de bioseguridad más preparados de toda Centroamérica.
Esta exigencia nace a raíz que las empresas se encuentran sin actividad económica desde hace más de 40 días y de no reabrir la economía se augura una crisis sin precedentes.
Gabriel Molina, gerente empresas sostenibles de COHEP, dijo que como empresarios no están “poniendo por encima” de la salud, la economía; Pero es necesario la apertura de las empresas de manera paulatina para que no se pierdan los empleos.
“No estamos poniendo por encima la economía o las empresas sobre la salud, para eso hemos trabajado fuertemente en este protocolo de salud y la idea es que el día que usted le toque salir por la terminación de su número de identidad pueda comprar en las empresas de su preferencia y de esa manera se aportará a la sostenibilidad de esa empresa. No podemos continuar con este decaimiento de la economía porque nos va a llevar a una mayor crisis”. Señaló, Molina.
Para el director de la Cámara de Comercio e Industrias de Cortés (CCIC), Pedro Barquero, el Gobierno debe encontrar un equilibrio entre cuidar la salud del pueblo hondureño y preservar la economía abriendo poco a poco los negocios y evitar el colapso de la economía.
«Tenemos que encontrar un equilibrio entre cuidar la salud de los hondureños e ir abriendo, poco a poco, los negocios. La urgencia es bastante, tenemos una gran presión porque los negocios están en serios problemas y obviamente para mantener los empleos vamos a tener que ir eventualmente abriendo la economía. A estas alturas todos los negocios están sufriendo de una manera fuerte, pero eso no quiere decir que vamos a ser irresponsables».
Por su parte, el doctor Carlos Echeverría, explicó que si el Gobierno comienza a aumentar las pruebas para detectar COVID-19 y los casos disminuyen se podría dar apertura a la economía siempre y cuando se establezcan las medidas de bioseguridad necesarias por parte de los empresarios.
“Si los casos empiezan a disminuir y estabilizarse y se empiezan a hacer muchas pruebas se podrá saber si podemos abrir la economía y cómo la vamos a abrir, qué empresas y qué medidas tomar para poder abrir, porque a veces los empresarios dicen una cosa y no la cumplen esa es la manera inteligente”.
A la vez, Echeverría reiteró que los empresarios deben aplicar pruebas rápidas a todos sus empleados y aplicar medidas de bioseguridad ya que estima que esta situación se prolongue por más de ocho meses mientras no se encuentre una vacuna.
“Los empresarios deben de colaborar tenemos que hacerlo de una manera inteligente. No es un día las ferreterías, otro día los limpia zapatos, etc. Si van a abrir los restaurantes primero debe haber una desafección completa del lugar, aplicarles pruebas rápidas a sus empleados, deben aplicarle medidas de bioseguridad correctas, ese será el modo vivendi por 8 a 12 meses o mientras no exista una vacuna”.