TEGUCIGALPA, Honduras
Las declaraciones emitidas por el candidato a la alcaldía capitalina y presidente del Partido Nacional, David Chávez, son una incitación a la violencia en el contexto de la campaña electoral de cara a los comicios de noviembre próximo, según analistas.
El experto en temas políticos, Omar García, expresó que es común que los militantes de los tres partidos políticos, Nacional, Liberal y Libertad y Refundación (Libre) emitan este tipo de mensajes que conllevan a la violencia.
«Es de esperarse que los políticos tradicionales hablen así, no hacen propuestas de desarrollo. Esto es un circo, hoy David Chávez puede decir una cosa y mañana otra, luego saldrá uno de Libre o liberal respondiéndole. Como no tienen soluciones solo de eso hablarán, el pueblo tiene que ser inteligente al decidir por quien votar», enfatizó.
Indicó que tales frases pueden generar respuestas negativas y sirven como distractor de los problemas de país, como el desempleo, cierre de empresas, aumento del costo de energía eléctrica, inseguridad y la crisis sanitaria.
«Ningún partido presenta una propuesta seria. El ciudadano debe observar a sus alrededores y pensar si le gusta el ambiente donde vive, si a él le gusta que le haga caso a este tipo de mensajes. Deberían de llamar a la paz, no a la confrontación, esto es una confabulación de los tres partidos que se encargan de generar más pobres», aseguró.
Por su lado, el candidato a alcaldía de la capital por el Partido Salvador de Honduras, Cárlenton Dávila, declaró que Chávez padece de problemas psicológicos y dejó en entredicho su capacidad para gobernar la comuna.
«Él le quiere echar sus guardaespaldas a medio mundo, anda con una campaña de violencia y creo que tiene problemas de comportamiento», dijo.
Añadió que «si es alcoholismo, se puede controlar, pero en este caso no. Creo que debemos someternos a una prueba de antidopaje, es un reto que le lanzo a David Chávez, de demostrarle a la población quién puede administrar una ciudad».
Cabe recordar que Chávez declaró en una intervención política que estaba dispuesto irse a los golpes con el candidato presidencial Milton Benítez y se declaró listo para confrontar a quien lo critique.
“En el Congreso Nacional, los de Libre querían relajo y me tocó sacar el puño y le soné las tapas aquel que dijimos (en alusión al parlamentario Jari Herrera). Si el Perro Amarillo también se descuida también se las sueno. El mensaje es claro: a mí nadie me va a atemorizar. Si quieren guerra, guerra tendrán”, arremetió.