TEGUCIGALPA, Honduras
El abogado y analista Raúl Pineda Alvarado habló sobre los problema que enfrenta el sistema penitenciario, señalando que lo anterior es el reflejo de una parte del fracaso de la política terminal del gobierno.
Para el jurista, la respuesta está en poner gente capaz y honesta a dirigir los penales y el problema se reducirá drásticamente “sino podemos controlar a los que están presos, ¿cómo vamos a controlar a los que están libres, y seguramente, armados?”.
No obstante, dijo que hay acciones de corto plazo que la presidenta, Xiomara Castro, pudo haber autorizado, “en lugar de hacer una intervención debió haber movido al menos parte de la Policía Militar de Orden Público a reforzar los centros penales”.
En ese sentido, enfatizó que en la cárcel de El Pozo ubicada en Ilama, Santa Bárbara, apenas había 60 policías para controlar a más de mil internos. Al mismo tiempo, señaló que Honduras está muy cerca de una guerra social “que nos obliga a vivir en un régimen de autodefensa”.
Ante el anuncio de la presidenta, Xiomara Castro, de intervenir los centros penitenciarios es de la opinión que “eso técnicamente los expertos en materia penitenciaria le llaman fetichismo penal, creer que un decreto va cambiar la conducta de los criminales y va cambiar la conducta de los que están encargados de la custodia de los criminales”.
“El problema no se resuelve haciendo más cárceles, ni se resuelve haciendo reformas legales. Se resuelve escogiendo el elemento humano adecuado para el manejo de estas instituciones”, puntualizó.