CIUDAD DE MÉXICO, México
El paso del huracán Otis, que arribó al estado mexicano de Guerrero en categoría 5 en la escala Saffir-Simpson, dejó más de 20 personas muertas y cuatro desaparecidas, informó la secretaria de Seguridad Pública, Rosa Icela Rodríguez
«Se recibió, lamentablemente, el reporte de 27 personas fallecidas y cuatro desaparecidas», dijo en una conferencia de prensa.
Sobre las personas de las que se desconoce su paradero, cuatro son integrantes de la Marina mexicana. Según el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, una de ellas murió.
En el mismo evento, López Obrador lamentó lo ocurrido y explicó que, para las tareas de rescate y remoción de escombros, se desplegaron miles de elementos de las Fuerzas Armadas.
«Están allá alrededor de 10.000 elementos del Ejército, de la Marina, de la Guardia Nacional. Allá están, se quedaron. Me acompañaron con toda la maquinaria pesada para ir abriendo caminos», apuntó.
La gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado, declaró que se sigue laborando para restablecer los caminos, así como la telefonía y el internet en la región, y aclaró que el 80% de los hoteles de Acapulco sufrieron daños por el fenómeno meteorológico.
El mandatario mexicano anunció que el próximo lunes 30 de octubre, se reunirán parte de los organismos financieros del país con el presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) del país, Jesús de la Fuente Rodríguez, en Acapulco, con el fin de trazar una hoja de ruta para restaurar la región.
Por otra parte, se realizará un censo para ayudar a las familias y los pequeños comerciantes del emblemático puerto; se les otorgarán apoyos económicos para que puedan recuperar lo perdido tras la llegada de Otis.
Además, López Obrador anunció que se forjará un puente aéreo para dotar de alimentos y productos básicos a los guerrerenses.
Guerrero es la tercera entidad más pobre del país, después de Chiapas y Oaxaca, y una de las más asoladas por la violencia y el crimen organizado.
Las aguas marinas más cálidas de lo usual para un otoño boreal, alimentaron la energía del monstruoso ciclón tropical que atravesó a una velocidad de casi 200 km/h la Sierra Madre del Sur, y aun así se mantuvo como huracán de categoría 1, para después avanzar como depresión tropical tierra adentro.
WeatherTiger LLC indicó que Otis es «el huracán más fuerte que jamás haya tocado tierra en México para el Pacífico oriental, aunque los registros formales solo se remontan a alrededor de 1950». (Con información de Sputnik).
