La historiadora Maude Bass-Kruege explica como los tacones en una antigüedad no tan distante eran de uso común para los hombres antes de serlo para las mujeres, sin ser lo único que ahora es reservado casi exclusivamente para las mujeres como las faldas y el maquillaje, en el caso de las faldas para eventos culturales como las escocesas y en desfiles de moda.
Según el artículo de Bass-Krueger los primeros en llevar tacones fueron los jinetes persas en el siglo X, para mantener las botas en los estribos con más facilidad. Una necesidad más que un estilo, o una moda, ya en el siglo XVII los aristócratas europeos usaban tacones donde eran considerados símbolo de virilidad y poder militar:
“Durante su reinado, cuanto más altos y más rojos eran los tacones, más poderoso era quien los llevaba”
En referencia al reinado de Luis XIV y que únicamente a las personas cercanas a él le permitía el uso del color rojo. Es hasta el siglo XVIII que los tacones llegan al calzado femenino y con esto superan la altura del tacón del hombre, con la irrupción en la historia de la Revolución Francesa el tacón masculino desaparece más por una cuestión ideológica pues era asociado con la aristocracia.
Otras prendas
En la cultura egipcia, griega, romana y azteca el uso de túnicas, togas y faldas, era común al ser fáciles de fabricar y de llevar. Los pantalones se usaban sobre todo para montar a caballo.
Es a partir del siglo XIV que comienza una brecha en la forma de confección entre hombres y mujeres: La mayor diversificación también lleva a que la moda se convierta “en un instrumento de rivalidad social” dentro de “una sociedad fuertemente jerarquizada” Escribe Giorgio Riello en su libro «Breve historia de la moda».
Pero faltó en sociedades como la rusa de 1,701 a decretar el uso del pantalón como exclusivo para hombres con la aprobación de una ley para obligar a los rusos a usarlo, con excepción de los granjeros y clérigos.
Accesorios y maquillajes
En los siglos XVII y XVIII especialmente en Francia el uso del color y el decorado era la preferida en las clases acomodadas tanto para hombres y mujeres. Tobias Smollet, citado por Riello, escribía que en París, un inglés que quisiera parecer respetable tenía que sufrir una “metamorfosis total”, y lucir grandes pelucas y trajes de seda con bordados, en lugar de las prendas de lana y franela que se llevaban en Inglaterra.
El maquillaje a lo largo de la historia ha estado presente en la vida masculina, para su comprobación hay que remontarse al antiguo Egipto donde se usaba kohl (cosmético a base de galena molida y otros ingredientes) en ojos y párpados y color ocre para labios y mejillas, en la Roma del siglo I d.C los hombres usaban pigmento rojo en las mejillas. En Francia en los siglos XVII y XVIII también se implementó el uso de lunares postizos. El motivo del uso de peluca de Luis XII se debió a su prematura calvicie, en su caso particular, pero también desempeñaba el trabajo de cubrir los piojos y la suciedad. El uso de polvos en la cara data del siglo XVIII.
Nada de esto asegura que el uso de prendas, calzado, maquillaje o accesorios hacían de esa sociedad una igualitaria, Federico Antelo Granero dice:
«La indumentaria masculina siempre ha subrayado su papel social, mientras que a la mujer se la ha limitado incluso a través de la vestimenta”
Y lo cataloga como una cárcel para las mujeres el uso de vestidos y corsé que dificultaban y limitaban su movilidad. El uso de accesorios, prendas, maquillas, encaje no tenia nada que ver con la adopción de rasgos femeninos sino rasgos clasistas ya que estaban asociadas al poder, estas modas establecidas vieron su fin con la Revolución Francesa para instaurar la percepción de igualdad y clasismo.
En el siglo XIX el pantalón queda por completo identificado como prenda moda masculina y comienza la construcción de “una visión de la masculinidad que ha ido perdurando desde entonces” apunta Antelo una nueva tendencia que busca la sencillez como sinónimo de elegancia pero con una estética que incluye etiqueta y muchos colores.
El centro de la moda deja de ser Francia y se traslada a Inglaterra es cuando nace el Dandi Británico como respuesta al modelo anterior francés de corte y clase. En la modernidad el uso o las tendencias de la moda han sido más abiertas y no tan ortodoxas en el uso de prendas, pantalones en mujeres, accesorios, uso del maquillaje masculino pero más moderado, una estética mas de moderación que de exceso, si bien el exceso existe es usado por artistas para maximizar su figura y alejarse de las normativas. La moda seguirá su curso natural, el cambio y las sociedades se seguirán adaptando a los modelos estéticos que se impongan.
Fuente original: verne.elpais.com